Me di cuenta de que soy compleja. Acá empieza todo. Soy débil, sobre todo a las palabras de los demás. Siempre lo mejor está puesto en el otro, y nunca en mi. Por el contrario, todo lo peor lo contengo yo. Una palabra de alguien que desconozco por completo puede hacerme llorar, y pensar horas y horas. No sé defenderme, no a mi. Sí a las personas que más amo. Felicito a todos por todo, y nunca puedo permitirme las felicitaciones a mi, por algún que otro logro.Pero en estos días, sin ir más allá, me sorprendió que una persona me diga que es grandioso empezar a conocerme, que soy interesante, y otras palabras más elaboradas que lamentablemente no recuerdo. Me quedé seria, sin saber qué decir.Con los demás, soy la persona más positiva del planeta, y conmigo soy la más pesimista. Mis inseguridades me acechaban, ahora no tanto. Hoy me miro y no soy tan así como me describo, algunas mejoras reconozco que tengo. Y sé que voy avanzando en un proceso muy lento. Espero que la autoestima baja no me acompañe toda la vida. Sé que si quiero puedo lograr revertir esta situación porque la verdad que estoy cansada ya, cansada de mi y mis pelotudeces. Dejé básicamente de ir a terapia por algo similar, porque pobre, siempre me repetia lo mismo. En todas las situaciones los problemas eran los mismos, y las soluciones también. Entonces era: o cambiar, o no ir más . Tomé la segunda, porque queria liberarme un rato, pensar, poder autoconvencerme de lo que realmente tenia que modificar, el por qué y el para qué .Hoy empiezo el camino, estoy parada frente al recorrido, tengo mis pies apoyados sobre el botón de Start, y empezaré a caminar despacito. Al menos sé lo que tengo que transitar, los objetivos y las causas. Al menos no estoy en cero como en algun momento